El día comenzaba donde lo habíamos dejado ayer, o sea, en la terraza de la casa Vivillo donde habíamos montado el desayuno.
Hoy es jornada de descanso, por lo que el resumen del día es bien fácil: Piscina, comer, siesta, piscina, barbacoa y terracita y para no deshidratarnos ir tomando zumos de cebada de vez en cuando….
A lo largo del día fueron apareciendo personajes un tanto extraños como este.
Después supimos que era el cantante “lolailo” que nos amenizaría nuestras farras nocturnas en el salón del billar y dardos en la casa Sequiade donde pasamos unos días en Portugal. (pero eso es otra historia y le toca contarla a otro jejejej)
Y así pasó nuestro estresante día de descanso.....
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